jueves, 11 de octubre de 2007

A dos líneas


Qué sencillo era escribir entre dos líneas al dictado, cuando la mayor complicación era atinar con la hache intercalada de la cohesión o plasmar en Micuaderno un exabrupto.
Y ahora, de repente, me quedé sin paralelas y sin voz que me diga qué escribir.
Aguántalo.


4 TRASLUCHADAS:

EL INSPIRADO dijo...

La única verdad... Es que nunca hubo paralelas, que la h aunque no quisiera, era muda, y que la voz que dictaba el dictado enmudeció, dejando paso a tu voz propia y personal. Ahora tú mandas, ahora eres tú quien aguanta sobre sus hombros cada una de las letras. Buen viaje!

Turn it up loud captain!!!

Un besoconsal!!!

Admin dijo...

buen viaje maño

Anónimo dijo...

Quizá ha llegado uno de esos momentos de la vida en los que debas guardar los folios en blanco y volver a las hojas con cuadrículas en fina línea azul clarito, o al cuaderno Rubio de caligrafía en el que "sólo" tienes que "repasar" lo que ya hay escrito...
Quizá, incluso, debas dejar coger tu mano por la mano de un "maestro", de los de verdad, no de esos de quita y pon, y dejarte llevar por su trazada.
Quizá llegar al vacío de la propia capacidad te haga recuperar tus paralelas y tu Voz.
¡BIENVENIDO!

Admin dijo...

bueno que????